viernes, 17 de junio de 2016

VISIÓN DE LA CREACIÓN Y EL UNIVERSO EN DISTINTAS CULTURAS. (5)




5. LA ASTRONOMÍA EN
      LA EUROPA ANTIGUA.

Antiguos pueblos que habitaron Europa tuvieron conocimientos avanzados tanto de los movimientos de los astros como de matemática y geometría. Realizaron grandes construcciones para la práctica de la astronomía realizada a simple vista (sin instrumentos), y así determinaron los solsticios y equinoccios y pudieron predecir los eclipses.
Los astrónomos de las culturas megalíticas tuvieron unos conocimientos realmente sorprendentes de los movimientos de los astros y de la geometría práctica. Lo demuestran los grupos de grandes piedras erectas (megalitos, algunos de más de veinticinco toneladas de peso), dispuestas de acuerdo con esquemas geométricos regulares, hallados en muchas partes del mundo.

El impresionante Stonehenge en Inglaterra.
Algunos de esos círculos de piedras fueron erigidos de modo que señalasen la salida y la puesta del Sol y de la Luna en momentos específicos del año; señalan especialmente las ocho posiciones extremas de la Luna en sus cambios de declinación del ciclo de veintiún días que media entre una luna llena y la siguiente.

Varios de estos observatorios se han preservado hasta la actualidad siendo los más famosos los de Stonehenge en Inglaterra y Carnac en Francia.


Alineamiento megalítico de Carnac en Francia.
Stonehenge ha sido uno de los más extensamente estudiados. Se construyó en varias fases entre los años 2200 y 1600 a.C. Su utilización como instrumento astronómico permitió al hombre del megalítico realizar un calendario bastante preciso y predecir eventos celestes como eclipses lunares y solares.

Stonehenge fue erigido a 51º de latitud norte y se tuvo en cuenta el hecho de que el ángulo existente entre el punto de salida del Sol en el solsticio de verano y el punto más meridional de salida de la Luna es un ángulo recto.


Rituales paganos Celtas.
El círculo de piedras, que se dividía en 56 segmentos, podía utilizarse para determinar la posición de la Luna en el transcurso del año. Y también para averiguar las fechas de los solsticios de verano e invierno y para predecir los eclipses solares.

Los círculos de piedras le dieron al hombre del megalítico en Europa un calendario bastante seguro, requisito esencial para su asentamiento en comunidades organizadas agrícolas tras el último periodo glacial, unos diez mil años antes de Cristo.


               

Pero, aunque el europeo primitivo aprendió a servirse del firmamento para regular su vida, siguió adorando los astros, considerados como residencia o incluso como manifestación de poderosos dioses que lo controlaban todo.



LOS CELTAS.

Introdu cción. Los celtas era un grupo de tribus feroces y guerreras que vivieron en la Europa Central y Occidental entre los siglos VIII y ...